El sábado 8 de junio, el AMPA del colegio organizó una excursión a Isla Mágica (Sevilla) y resultó todo un éxito. El interés que han mostrado los alumnos y sobre todo, los padres por participar en este viaje, ha hecho que se consiga completar ¡casi tres autobuses!.
El día fue fabuloso, no sólo porque las condiciones meteorológicas nos permitieron disfrutar de una temperatura ideal, sino porque desde la mañana bien temprano, todos estábamos tan ilusionados que nuestras caras sonrientes mostraban una satisfacción por compartir una jornada en un lugar encantador, no sólo para los más peques, sino también para los mayores.
Cuando llegamos y con entrada en mano nos dispusimos a ir de atracción en atracción, a vivir momentos de risas, sobre todo en aquellas donde el resultado era humedecerse hasta los huesos, pero problema que resolvíamos con nuestros estupendos “chubasqueros” o mejor dicho bolsas gigantescas que nos tapaban, pero que al final ¡nos mojábamos!.
Si bien, también hubo momentos impactantes, donde algún que otro grito se escapó, no nos referimos a las típicas escenas de la casa del terror, sino a la actuación de los piratas, que sin saber cómo ni por qué, el pirata más malvado se dirigió a madre Pilar, apuntándole e inculpándole del robo del tesoro, pero que duda cabe, que nuestra madre estaba más que arropada por los papás y al final no pasó nada, simplemente quedó como anécdota.
Al final de la jornada, nos agrupamos todos en torno a la escalinata para ver el espectáculo ecuestre y el montaje de luces, fuegos artificiales y agua, significando cierre del parque.
Ya muy tarde y de vuelta al autobús, todos íbamos más que cansados, pero nuestra sonrisa seguía en nuestras caras, comentando el día tan estupendo que habíamos pasado, no ya sólo por lo que se disfrutaba en el parque, sino por la oportunidad de convivir con el resto de compañeros y papás reafirmando la gran familia que supone nuestro colegio.
Debemos seguir animándonos y participar en estos eventos, viajes ya no sólo por nuestros niños que les gusta divertirse con sus compañeros, sino también por los padres porque supone una buena ocasión para conocerse y compartir estos momentos que tanta importancia tienen en la etapa de nuestros hijos.